La piel o, mejor dicho, la epidermis, es el órgano más grande del ser humano y el que más expuesto está a los agentes externos.
Contaminación, UV, polen, el tabaco, los restos de productos químicos de algunos productos de higiene o limpieza…son muchos los frentes contra los que la piel se enfrenta a diario y, dependiendo de su propia barrera, puede gestionarlos o surgen algunos de los problemas más habituales que acaban en las consultas de dermatólogos.
Eccemas, sarpullidos, infecciones, acné, envejecimiento precoz de la piel son solo algunas de las dolencias más habituales entre los pacientes españoles que buscan ayuda en las consultas de especialistas para tratar de mejorar no solo el aspecto de la piel sino paliar malestares como los picores o la descamación continuada.
En este sentido, el uso del CBD puede ser de gran interés. El CBD es uno de los cannabiodes derivados del cannabis que está avalado, además, por la Organización Mundial de la Salud. Su carácter no psicotrópico es lo que está llevando a la industria médica y, también a la cosmética, a incluir este componente en sus estudios para ver cómo puede revolucionar ciertos tratamientos.
En el caso de España, además, donde la legislación actualmente solo permite la compra de productos que sean de carácter tópico, sus soluciones en aceites, cremas o mascarillas puede suponer toda una revolución para quienes padecen problemas en la piel.
¿Qué tres mejoras ofrece el CBD en la piel?
Hay, principalmente, tres motivos por el que las cremas y aceites formuladas con CBD son un buen aliado para la salud de la epidermis.
Tal como explican desde Mama Kana – una tienda online francesa especializada en este tipo de productos y que exporta por toda Europa preparando los pedidos en menos de 24 horas para hacer envíos con gran discreción de productos de gran calidad relacionados con el CBD – la capacidad antioxidante, hidratante y calmante del CBD es lo que permite que sea un tratamiento perfecto para pieles con problemas.
- Propiedades calmantes: para las pieles sensibles, con psoriasis o dermatitis, el CBD se ha alzado como uno de los ingredientes clave por sus propiedades calmantes, permitiendo mantener los brotes y reactividad cutánea controlados.
- Propiedades contra el acné: sus propiedades calmantes permiten controlar los brotes acneicos. Además, numerosos estudios están demostrando que también controla la formación de sebo que tienen las pieles con tendencia al acné, lo que colaboraría con la reducción del brote.
- Propiedades antienvejecimiento: su capacidad antioxidante es clave en este punto. Su potencial como hidratante de profundidad también colabora a que la piel se sienta más elástica, evitando las marcas del tiempo o reduciéndolas considerablemente.
Estos tres principios y acciones del CBD es lo que está haciendo que muchas empresas cosméticas comiencen a tenerlo en cuenta en sus formulaciones y, sobre todo, que el gran público comience, gracias al aval de estudios científicos, a tenerlos en cuenta a la hora de decidirse por un producto u otro.