Incluso aquellos que no están familiarizados con el universo de la belleza ya se han cruzado en algún momento con los consejos para el cuidado de la piel. Entre 2017 y 2018, las búsquedas de «cuidado de la piel» crecieron más del 20% en Google y el 71% en YouTube.
Los más apasionados ya tienen intimidad con varios productos. Son geles, cremas, esencias, sueros con funciones de hidratación, nutrición, renegación y antienvejecimiento para la cara y el cuerpo. Pero si esta larga lista parece ser suficiente, ahí es donde está el error. La bola del turno está en una categoría que sólo crece fuera de Brasil y promete llegar aquí pronto. Puede ser que un frasco específico para el cuidado íntimo de la piel viva en su estante.
Olemos el aroma de la polémica en la tendencia.
Los jabones íntimos, mucho más comunes, están lejos de ser unánimes. «La vagina no necesita ser lavada, porque la mantiene alejada de las bacterias que ayudan a mantener el pH correcto y la protegen de la proliferación de bacterias malas», explica la ginecóloga Karina Tafner, de São Paulo. Según el médico, varios factores externos, como el uso de productos cosméticos e incluso lubricantes, pueden predisponer a las infecciones.
«La vagina es el canal que se extiende desde su apertura exterior en la vulva hasta el cuello del útero, por donde pasa el flujo menstrual. La vulva se refiere a las porciones externas de la entrada de la vagina, que incluyen los labios vaginales internos y externos, el clítoris, el monte púbico y la uretra.
Esta área externa, sí, necesita cuidados de higiene para eliminar el sudor, la secreción y los residuos de orina», explica el especialista. Si quieres usar jabón, elige uno neutro, hipoalergénico, sin color ni perfume. Tenga cuidado con las exageraciones e invenciones milagrosas, porque existe el riesgo de desarrollar problemas como la dermatitis de contacto.
«No debemos olvidar que la vagina tiene un olor natural y característico. Aunque a algunas mujeres les molesta esto, no significa necesariamente que haya una infección. Una limpieza excesiva no altera el olor de la vagina y puede incluso empeorar la salud íntima», explica Karina.
Sin embargo, los fabricantes de los nuevos productos en el mercado se aseguran de que las creaciones sean probadas dermatológicamente y siguen los consejos médicos en cuanto al pH, el uso de ingredientes no irritantes y seguros.